sábado, 1 de septiembre de 2012

Piña, gorro, estación, camión y sorpresa

La piña cayó desde muy alto y le dio en la cabeza a un cerdito que estaba comiendo bellotas. Le podía haber roto la cocorota pero por suerte esa mañana se había levantado estornudando y entonces su ama le había puesto un gorro rojo de lana en la cabeza y por eso no sangró pero por si acaso la madre cerda, que lo había visto todo desde la pocilga mientras la barría, lo llevó corriendo a la estación de autobuses para llevarlo al médico pero era domingo y la estación estaba cerrada, entonces la cerda se puso en la carretera con el cochinito en brazos e hizo auto-stop; paró un camión y ¡sorpresa! estaba lleno de cerditos y además el conductor era veterinario y le curó y se fueron con él de vacaciones y mientras tanto la mamá cerda hizo gorros de todos los colores para los demás cochinitos.